26 octubre 2007

Abuela

Ya se nos fue. Como buena Robles, resistió muchos años, pero la naturaleza, además de mandar, no perdona. Se la ha llevado esta misma tarde a dar un paseo por las nubes. Se veía venir, por eso no me ha sorprendido tanto. A mi madre tampoco, y me deja más tranquilo. Ella, al igual que yo, sabía que su espíritu nos había dejado hace tiempo, antes incluso de verla por última vez.
No creo en estas cosas. Ella sí lo hacía, a su modo, y sé que estará mejor lejos de aquí en su paraíso. Ahora que ya se ha liberado de su cuerpo oxidado, podrá seguir soñando con su espíritu eterno con su niño Jesús, su rosario y las historias que contaba de Zamora....
Que lo pases bien allá arriba, abuela. Un beso.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Siento lo de tu abuela amigo.
Un abrazo

santi

Anónimo dijo...

oye.... se me ha puesto la piel de gallina.....



un beso carinyo....
laieta